... de empezar el Camino del 2009, tenemos que ponernos ya manos a la obra en su preparación definitiva.
Nos queda por hacer una revisión final del reccorido a realizar: inicio (quizá desde León no tengamos tiempo a llegar a Santiago ya que los días con los que contamos no pueden alargarse y el trazado es duro), logística de transporte al sitio de partida, etapas definitivas, albergues donde hacer noche, etc. Quizá sea necesario hacer una reunión para fijar todos estos detalles alrededor de una buena fabada que nos tabiquemos uno de estos próximos sábados.
También nos queda volver a revisar, y ver si lo tenemos disponible, el material a llevar y las correspondientes alforjas y transportines. Yo ya he hecho las dos o tres últimas salidas con transportín y alforjas para ir haciéndome al peso extra.
El último aspecto también por terminar de ultimar es el de la preparación física. Este año el Camino es muy exigente, por lo que voy a empezar a tratar de salir a hacer kilómetros alguna tarde/noche que pueda (ahora que empieza a hacer buen tiempo y los días empiezan a ser más largos), quizá saldré a correr un rato por las noches para coger un poco de respiración y, como parte de este minucioso plan de entrenamiento, hemos ido el fin de semana pasado a entrenarnos en altura. Además de las durísimas sesiones de esquí, no faltaron las visitas a Don Vielhito, a Casa Pérez en Unha, y a algún otro entrañable rincón, aunque como íbamos pocos días no pudimos visitar todos los templos gastrónomicos de la zona. Eso sí, en un bar de tapas en la rotonda de entrada a Vielha según se baja desde el Parador, una Dominicana muy simpática nos puso una de bravas que nunca imaginamos que las prepararían tan ricas en esos lares. Tenían más raciones que seguramente también prepararía muy dignamente. Buen sitio para volver. Adjunto documentos gráficos.