lunes, 2 de mayo de 2011

Día 1. Guillena - Almadén de la Plata. 54,53 Km







Kilómetros: 54,53
Tiempo pedaleando: 4:15:39
Vel. media: 12,79 Km/h
Vel. Máxima: 45,34 km/h

Salimos sin madrugar mucho, hacia las 10. Llueve a cántaros y el camino está impracticable por lo que tenemos que ir, lloviendo, por carretera hasta Castilblanco de los Arroyos cruzando por Burguillos.

Desde ahí hay casi otros 20 km por carretera hasta la entrada a la finca Los Berrocales. A mitad de camino está la finca La Yerbabuena, la de Rocío Jurado. Paramos a la entrada a hacer una foto y empieza a llovernos con verdadera intensidad. Mientras que hacemos los kilómetros hasta llegarnos a Los Berrocales nos empapamos de veras. Llegamos a la entrada a las 14:00.

El domingo pasado le cambié las pastillas a los frenos y si bien el trasero va bien, el delantero va frenado, por lo que las cuestas arriba me cuestan mucho. Espero que con el paso de los kilómetros las pastillas se vayan desgastando y el efecto de frenado vaya aminorando.

Al poco de entrar en Los Berrocales, Pedro cree haber pinchado. Nos llegamos a una caseta forestal para guarecernos mientars que vemos qué le pasa. Al final aparenta que no hay pinchazo y con reponer aire es suficiente. Proseguimos viaje y al poco para por fin de llovernos. La finca es preciosa y vamos completamente solos. Al principio se va entre alcornocales, para pasar a una zona de jara y al final pasar por una zona de pino repoblado.

Vadeamos varios cauces de arroyos que bajan muy crecidos. En uno de ellos nos ayudamos de unos postes de hormigón y pese a todo el agua casi nos llega a las alforjas.

El final de Los Berrocales es una ascensión de algo menos de 1 km al Cerro del Calvario. La ascensión es muy dura y hay que bajarse de la bici y empujar. La hacemos poco a poco porque hay tramos en los que el peso de las alforjas hace que la bici se vaya para atrás. Al final coronamos y contemplamos todo el parque desde un mirador.

Por el otro lado, a menos de 1 km, está Almadén de la Plata. Afortunadamente nos dejó de llover antes de subir El Calvario. De otro modo no sé cómo hubiéramos podido subirlo. Cruzarnos los 15 km de Los Berrocales nos ha costado 3 horas.

Llegamos a Almadén de la Plata a las 17:00. Tardamos más de media hora en buscar un alojamiento que teníamos identificado pero no conseguámos localizar. Al final nos llegamos al Hostal Conchi. Nos damos una vuelta por el pueblo y cenamos pronto junto con una pareja austríaca.

Respondiendo a un mensaje del trabajo el móvil me hace cosas extrañas. Lo apago y al volver a encenderlo no me valida el PIN. Lo reintento varias veces, incluyendo el PUK, y al final la tarjeta se bloquea, dejándome sín móvil y sin GPS.

Me meto en la cama a las 10. Me dan unos calambres en las piernas y hago algunos estiramientos antes de quedarme dormido.

Hoy hemos pasado por: Guillena, Burguillos, Castilblanco de los Arroyos, Finca Los Berrocales, Almadén de la Plata.

Día 0. Desplazamiento a Sevilla




Voy con Pedro a recoger la furgoneta. Entre idas y venidas e ir a recoger a Luis y Sole, al final salimos tarde.

Vamos por la Nacional 5 para evitar el tráfico de la Nacional 4. Despues de bastantes horas de ir a 110 km/h llegamos a Guillena, nuestro inicio de ruta, y tras comprobar que todos los alojamientos están a tope, nos hacen sitio en una habitación de la casa de los propietarios de un hostal.

Nos vamos a Sevilla a dejar a Sole. Nos vemos con su hermana Juana y tras tomarnos una cocacola nos despedimos de ellas para ir a dejar la furgoneta.

Tenemos que dejarla en el polígono industrial Las Negrillas, que está más que en las afueras. Llegamos allí casi a las 9. Para regresar a Sevilla para coger algo que nos lleve a Guillena no encontramos nada de nada. Es un sitio totalmente aislado. Así que empezamos a andar por la autovía en dirección a Sevilla hasta alcanzar un Corte Inglés, pero allí tampoco hay ni taxis ni autobuses. Al final llamamos por teléfono a un taxi que despues de más de media hora nos recoge y nos lleva a Guillena.

Cenamos algo y vamos a la casa de los dueños del hostal. Luis y Pedro duermen en una habitaciòn y yo en un sofá de dos plazas tan pequeno que ni mi hijo de 8 años cabría en él. Saco las piernas por una lado y me apaño para coger postura y tratar de dormir.